EF VEGAS ALTAS

Este pasado verano se conformaba un nuevo club. La Escuela de Fútbol Vegas Altas. Está compuesta por chavales de Torviscal, Palazuelo, Rena, Villar de Rena y alguno más. Surge ante la necesidad de darle cabida a chavales que quieren practicar el fútbol y que al no tener sus pueblos suficiente entidad para formar un equipo completo, tenían que desplazarse a Villanueva o Don Benito para practicar el mismo. 

Sin embargo esto no es fácil de llevar a cabo. Al interés en primer lugar de varios alcaldes pedáneos se une el de algún entrenador que quiere participar en el proyecto, supongo que a cambio de una mínima remuneración, por otro lado algo para mí imprescindible para que todo salga adelante y se involucren en condiciones óptimas. Además, contar con instalaciones mínimas para ejercitarse. Por ejemplo cuentan con los campos de fútbol 11 (adaptables a fútbol 8) de Torviscal, Zurbarán, Valdehornillos creo y alguno más. Pero los mismos no están en las mejores condiciones. Qué pasa cuando llega una semana de frío y lluvia y los chavales adolescentes tienen que acudir a entrenar por la noche? Pues que al problema del desplazamiento, hecho por padres, se une la desgana obvia por las condiciones del entreno. No digo que sea imposible pero sí es complicado.

Pero en cualquier caso para mí hay un problema mayor. Que es como se pueden identificar con el equipo los chavales que llegan desde fuera. En los más pequeños disfrutarán con el simple hecho de hacer deporte pero en los mayores vi un par de episodios el pasado sábado que no gustó nada. En el partido entre el CD Don Benito y sus juveniles, jugado en Torviscal, un jugador local riéndose de otro del mismo equipo pero de otra localidad. Me resultó bastante bochornoso ciertamente pero además se pudo liar porque su familia estaba allí y obviamente se lo afeó bastante. Ese para mí es el principal problema.

No creo que haya que buscar ni plantear soluciones. Creo que es posible que desaparezca en pocas temporadas, al menos en algunas categorías y esto contando con que las entidades locales menores, que son dependientes de Don Benito y Villanueva de la Serena, sigan aportando cuotas económicas suficientes para que se desarrolle la actividad y sobre todo cobren los que dedican su tiempo y esfuerzo a que los equipos sigan trabajando y funcionando. Esta es mi opinión.

PD: No comentaré la cantidad de patadas e insultos que recibieron los calabazones. Amenazar de muerte? o de arrancar la pierna? pues sí, también pasa. Penoso.